jueves, 24 de mayo de 2012

Uno, el muerto y la tía

- Shh, me pisás.
- No, no te piso. Ay...
- ¿Qué?
- Está igualito a como dormía en casa.
- Sí, es verdad. Increíble que nos haya dejado.
- Hay que besarlo.
- ¿Al muerto?
- Es tu primo...
- Es un muerto.
- No seas irrespetuoso y besalo, es la última vez que se ven. Ay...
- ¿Qué te pasa?
- Llegó la tía, está destruida.
- Desde siempre.
- No seas maleducado, lo quería mucho.
- Psss...
- Voy a decirle...
- Ajrsk... ¡Qué hago acá!
- Dios mio... ¡El muerto vive! Ayudame mamita.
- Dios, Padre, Jesús y toda la iglesia junta.
- ¿Por qué estoy en un cajón?
- Creímos que estabas muerto.
- Obviamente no, sáquenme de acá.
- Sí.
- No.
- ¿Cómo que no?
- Tu tía cree que estás muerto, si te ve vivo se nos muere.
- ¡Aprovechamos el cajón!
- Basta de faltas de respeto.
- Voy a distraerla, vos acomodate en el cajón.
- Ni muerto.
- Me asombra que conserves el sentido del humor.
- Ahora vengo... ¡Tía, aguarde, no entre!
- Y... ¿qué se siente estar muerto?
- No me morí, imbécil, estaba medio dormido, medio en coma.
- El hospital era un desastre.
- Pero la enfermera estaba muy bien, eh.
- Sí, y no sabés, la invité a salir y me dijo que sí.
- ¡Me muero!
- De verdad. Cuidado que ahí viene la tía.
- No somos nada.
- Nada, tía, nada. Somos el destino que Dios nos manda.
- No somos nada.
- Nada, tía, ya le dije que nada.
- Está muy maltrecho.
- Sí.
- Y era muy joven.
- Tuvo una vida de excesos.
- Siempre supe que se fumaba cualquier cosa.
- Tía, por favor.
- Si todos lo decían: "Ahí va el porrero".
- ¿Porrero?
- Sí, o a veces le decían: "Churrero, conseguime algo".
- Tía, ¿Cómo sabe esas cosas?
- Sé por vieja, mi hijo. Por vieja...
- Claro, bueno, puede ir yendo.
- No, antes quiero sacarme una duda existencial.
- Tía, me parece que no es buen momento.
- Y si no es ahora no es nunca. Si en un rato lo entierran hasta el fondo.
- Dios lo cuide.
- Siempre quise saber si lo que decían es verdad.
- ¿Qué cosa decían, tía?
- Bajale el cierre del pantalón, quiero ver si es verdad.
- ¡Tía, por Dios!
- Una ardilla muerta, decían por ahí, quiero pispear.
- No tía, le digo que no.
- Cómo que no.
- Ajskrkj ¡Ay!
- Es un milagro ¡Vive!
- ...
- ¿Tía?
- ¿Tía?
- ¡Mataste a la tía en mi velorio! ¡Arruinaste mi momento, orangután!
- No la maté, vos te moviste.
- Ayudame a meterla en el cajón.
- ¿Y vos dónde te vas a meter?
- No estoy muerto y no pienso estarlo.
- Agarrala de los pies.
- Uno, dos... tres.
- Cerrá el cajón y escondete.
- Sí, ya mismo.
- Dios mío, qué funeral de locos.
- No somos nada.
- Hola, padre, ¿Cómo le va?
- Bien, hijo, viendo a ver el designio del Señor.
- Terrible, padre, peor imposible.
- Se fue y se llevó con él una gran duda que siempre tuve.
- ¿Cuál, padre?
- Si tenía un gato muerto ahí abajo... ayudame a abrir el cajón.

lunes, 14 de mayo de 2012

Los libros que traerá el 2012

Si bien la Feria del Libro ya pasó, las editoriales preparan cartas fuertes para lo que queda del año.

Puto el que no estatiza, de editorial La Cámpora. Axel Kicillof explica en 400 páginas por qué un país en serio debe privatizar y estatizar cíclicamente. Además, aborda otros temas de interés general, por ejemplo "Cómo hacer que el Estado te pague para que hagas perder plata a sus empresas" e "Intervención en 10 simples pasos".

No seré feliz pero tengo trabajo, de editorial La Juan Domingo. Daniel Scioli analiza minuciosamente cómo hará para que no lo rajen, aguantar hasta 2015 y serrucharle el piso a Cristina. Mariotto iba a hacer el prólogo pero al final prologó el libro de Sandra Russo.

El fin está cerca, de editorial La Lilita. Elisa Carrió dispara comentarios irreverentes en una obra imperdible. "Por qué Kirchner fingió su muerte" y "Confesiones de una viuda alegre" son los capítulos con los que enloquecerá.

Última estación, de editorial TBA. Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime cuentan página a página cómo es manejar un servicio obsoleto, viejo y subsidiado. El prólogo es de Cirigliano pero ayudó la Secretaría de Transporte.

Boquitas calladas, de editorial UCR. El bloque radical lanza una obra fundamental para explicar cómo es criticar al kirchnerismo pero al mismo tiempo votarle todas las leyes. Edición limitada -una por cada correligionario-.

Bestiario, de editorial PPT. Barone, Sandra Russo, Barragán y compañía fundamentan por qué Cristina es la heredera de Dios en la tierra. Cabito pone una cuota de humor y en la última página Beatriz Sarlo los atiende a todos juntos.